La Cooperativa Unión Majorera de Cosecheros y Exportadores de Antigua ha abierto sus puertas, cerradas a principios del año pasado, con nuevas fuerzas e instalaciones renovadas. Más de 70 profesionales del sector agrícola y ganadero han recuperado la marcha de esta entidad, fundada en 1951, con el objetivo claro de ahorrar costes en estos tiempos en los que la pandemia ha paralizado o ralentizado la actividad.
Los precios de venta se han reducido considerablemente, explica el presidente de la cooperativa, Bernando Peña, quien pone por ejemplo que el kilo del cabrito, uno de los productos “estrella”, se anuncia hoy por 4,95 euros kilo “cuando antes se pagaban 9 o 10 euros”. En estas circunstancias, la cooperativa apuesta por reducir los costes de producción, y sobre todo, en la adquisición de alimentación del ganado. Con la centralización de las compras y la reducción en el número de intermediarios, las ganancias, escasas, ayudan a equilibrar los números “y podemos así llegar a fin de mes”, insiste, Peña.
Falta “cercanía” con el sector
Son tiempos difíciles y la comercialización ha sido complicada. En estas circunstancias, los profesionales han echado en falta “cercanía” por parte de la primera institución insular. “En otras islas, los Cabildos se han volcado mucho más con el sector”, recalca, “veo demasiada frialdad de la administración a la hora de acercarse al ganadero, al sector primario”. Un sentir que comparte, asegura, la mayoría de ganaderos de la isla que hubieran esperado “más garra, más fuerza, más propuestas” por parte de la administración insular.
Los socios de la cooperativa echan mano de la “ilusión” para impulsar esta cooperativa que nace con la vocación de convertirse en un proyecto más amplio y desarrollar actividades que permitan comercializar el producto de la tierra “y también la carne”. En esta línea, barajan distintas opciones como abrir la cooperativa al público para vender directamente al destinatario final e, incluso, habilitar una terraza con grill asador donde, además, se pueda degustar.
