jueves. 28.03.2024
Imagen de los juzgados de Puerto del Rosario.
Imagen de los juzgados de Puerto del Rosario.

El Juzgado de lo Penal Número 2 de Arrecife con sede en Puerto del Rosario ha condenado al concejal del Ayuntamiento de Puerto del Rosario José Juan Herrera Martel a cuatro meses de prisión e inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de condena como autor de un delito continuado de acoso sexual.

Además de la condena penal, según adelanta este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) en nota de prensa, la sentencia obliga al edil a indemnizar a la víctima, una asesora municipal, con 3.000 euros.

José Juan Herrera en los estudios de la COPE en Fuerteventura.
José Juan Herrera en los estudios de la COPE en Fuerteventura.

El fallo declara probado que entre mayo y septiembre de 2019  el acusado, “con manifiesta intención de satisfacer sus deseos de naturaleza sexual, realizó múltiples propuestas de idéntica naturaleza” a través de redes sociales a la víctima, “cargo de confianza en el meritado ayuntamiento y compañera de trabajo de aquel, pese a ser conocedor de las constantes negativas de la misma, generando con ello una grave situación de ansiedad a la víctima”.

La sentencia es susceptible de recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Las Palmas.

Historia de la denuncia

El pasado 21 de julio de 2021 este diario adelantó en primicia informativa que la ex cargo de confianza y número tres en la lista de la Agrupación de Electores de Puerto del Rosario en las últimas elecciones locales, Yaiza Sotorrio Espinel, había presentado una querella contra el alcalde de Puerto del Rosario, el socialista Juan Jiménez, y el edil José Juan Herrera Martel por la comisión de un presunto delito de acoso sexual.

Según la querella a la que tuvo acceso Crónicas de Fuerteventura en exclusiva, pocos días antes de su nombramiento como cargo de confianza Herrera Martel, edil y número dos de la misma lista electoral que la querellante, se puso en contacto con ella para mostrarle sus deseos de  mantener relaciones sexuales. Unas manifestaciones que según el testimonio de la denunciante se hicieron de forma reiterada a lo largo del tiempo a pesar de la negativa a acceder a las presuntas pretensiones de su compañero en la institución.

Tras denunciar la situación a varios representantes del Ayuntamiento, que estaban convencidos desde la defensa que se personarían como testigos y que a su vez pusieron en conocimiento de los hechos al alcalde, el acoso cesó, hasta que Manuel Travieso, cabeza de lista en la Agrupación de Electores, dejó de pertenecer al Gobierno municipal. A partir de ese momento, y según el documento de la querella ahora ratificada en sentencia, José Juan Herrera Martel volvió a realizar a la querellante proposiciones de índole sexual y “un poco más tarde las insinuaciones de que si no accedía a las relaciones sexuales se produciría el cese de la querellante”.

El 8 de julio y a instancias del alcalde se reunió con el primer edil, quien le manifestó su intención de cesarla de su cargo. Días después, la querellante le remitió un whatsapp en el que constató que esta situación era para ella “insostenible” y le rogaba que tuviera la “decencia” de darse prisa en notificar el cese. También le confesaba su incredulidad por que pudiera “participar o intervenir en la ejecución de una situación de acoso sexual, porque para mí eres igual o más responsable que el acosador, ya que conocías y sabías toda la historia del acoso hacia mi persona y has decidido, con mi cese, que el acoso tenga éxito, aceptando que me cesas por no querer mantener relaciones sexuales con el concejal”. Tras recibir este mensaje, según explicaron desde la defensa de la víctima, el regidor le contestó que no había firmado ni consentido nada. Sin embargo, el 13 de julio volvió a llamarla a su despacho y le indicó que tenía que cesarla, que la decisión ya estaba tomada, que él no quería hacerlo “pero que Jose (José Juan Herrera) se lo exigía y daba a entender que su puesto de alcalde dependía de eso”.

Finalmente, el pasado 16 de julio de 2020 le notificaron el decreto de cese y dejó de ser personal de confianza del Ayuntamiento de Puerto del Rosario.

Sin embargo, y a pesar de la denuncia contra él, el pasado mes de septiembre la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas confirmó en un auto el sobreseimiento de la querella criminal contra el alcalde de Puerto del Rosario por un presunto delito de colaborador necesario en el acoso sexual contra Yaiza Sotorrio, confirmando así el archivo que había realizado inicialmente el juzgado de primera instancia de la capital majorera.

Según determinó la Sección Primera, la querella contra Juan Jiménez como colaborador necesario “vincula gratuitamente” su cese como cargo de confianza de la Agrupación de Electores con el acoso sexual denunciado “cuando hay sensatas razones para poner ello cuanto menos en más que prudente entredicho”.

José Juan Herrera, condenado a cuatro meses de cárcel por acoso sexual